solidificando

Hoy no esquivare los cuchillos,
entregare mi corazón al llanto,
hasta hacerlo ahogar....
Sucumbiré al delirio y me fragmentaré de dolor.
Improvisaré la memoria y sonaran los tristes violines.

Hoy no opondré resistencia.
-lloraré bien-
vomitaré llanto,
beberé llanto,
dormiré llanto,
hasta secar mi alma y solidificar el corazón.

Cuando llegue a mi el hastío
y los caudales de mi tristeza como ríos se lleven la desolación,
serán fosiles mis memorias, mis amores, mis intentos.
y entonces descubriré que bien hace llorar.

Aquí esta la sal,
y la sal lo cura todo....
inclusive los amores infectados por ambiguedad.
las contradiccciones
y las mantenidas fantasías.

Hoy no esquivare los cuchillos,
me resignaré honorablemente
y en una esquina inerte del planeta
agradeceré haber sentido de forma tan implacable
la honestidad impredecible del universo.