martes, abril 03, 2012

Amor sábatino



Tal vez existan otras formas de amar,
yo escogí un amor de cocina, de spagghetti recién hecho,
de tomate y albaca.
Amor de sábado.
Y mientras el resto del calendario traiga consigo
sus dolores de cabeza propios de la rutina laboral,
son nuestros sábados la delicia.
y nuestra cocina, una fiesta de besos,
un nido de risas.
la conjunción aparente de la complicidad.

Y aunque somos menos jóvenes que aquellos años que sin conocernos conquistábamos el mundo
hoy nos conocemos más prudentes, menos furicos
más preparados para el amor.
Porque el amor es cocina, pero es guerra...
es guerra contra uno mismo...
contra el capricho
contra nuestra malcriadez
contra el ego.

Y en mis sábados no hay ego que gane...
no hay capricho,
no hay malcrianza...
mis sábados contigo, son de spaghettis,
de vino y de papas.